4 de julio de 2007

NATURE y SCIENCE ganan el sucedáneo del Nobel

Si amiguitos, estas dos revistas parabienes de la humanidad y defensoras a ultranza de la verdad científica han ganado un premio.
Tenían que recuperar prestigio, pero como el Nobel debe salir caro o no hay categorías en las que meterse, se han conformando con un Príncipe de Asturias, es decir el sucedáneo del Nobel. Premio que es taaaan conocido en el mundo que la revista Nature en su página web tiene que explicar en qué consiste.

Los motivos para entregar el premio a estos son varios, pero cito textualmente.... "a lo largo de sus más de cien años de historia, se han convertido en los más rigurosos e importantes medios de comunicación de los principales avances de la ciencia. Estas revistas, vinculadas a las universidades más importantes del mundo, son ineludible referencia universal y vanguardia de la información científica."


Recordemos algunos de los grandes momentos de estas revistas:

En 1934 Nature rechazó publicar el artículo de Enrico Fermi sobre la interacción débil por considerarlo "demasiado alejado de la realidad". Chúpate esa.

Entre 2000 y 2001 tanto Nature como Science publicaron los artículos de Jan Hendrik Schön. Al parecer el bueno de Schön (palabra que significa bonito en alemán) no sólo "decoraba" los resultados de sus experimentos sino que directamente se los inventaba, muy grande. Lo que llamaríamos tirar "p'al Nobel" por el camino más recto.

Y finalmente el caso del amigo Hwang Woo-Suk ya referido en este humilde blog (ver post "I love scinece" de 29/12/2005). Este buen hombre se dedicó al igual que Schön a publicar artículos como churros en estas dos revistas, en los artículos se ve que se tiraba de la moto con la clonación. Lo único que le faltaba decir y que estaba explícito y en lo que los "referees" no cayeron es que los experimentos eran sólo mentales, que no los había hecho. También muy grande. De hecho el interfecto era un héroe en su país. (Prefiero como héroe a un científico tramposo que a una tonadillera y un torero, dicho sea de paso)

Se ve que hay más ejemplos pero no voy a bucear más en la bibliografía. Creo que ahora les enviaré mi enhorabuena a los editores de tan dignas revistas junto con un telegrama conjunto de Schön y de Hwang exigiendo su parte del dinero del premio.

Si es que ya lo dicen en Louisiana "no publiques en Nature"... no da prestigio.

1 comentario:

Dr. Muerte dijo...

El grande de Schön.... Por lo visto, al final admitió haber manipulado los datos, pero aseverando que el tenía la certeza de que los fenómenos que publicaba en verdad existían. Si es que cuando la pasión se une a la ciencia pueden surgir cosas maravillosas.