Son las cinco los primeros prusianos están ya desplegados frente a Placenoit pero esperan refuerzos, la guardia francesa esta frente, no son suficientes. Mientras, tras ellos, en la otra punta del campo de batalla, Ney continúa intentado avanzar hacia Hougomont, una vez allí ya verá como lo asalta, L’empereur pregunta una y otra vez si ya ha caído Hougomont. Por la izquierda la división de Bachelu está destrozada, la caballería apenas puede apoyarle, por la derecha la división de Foy ha perdido a la mitad de sus hombres está exhausta.
Jerome puede intentar avanzar, pero a cada paso las columnas dejan un rastro de cadáveres por el camino, ha perdido las baterías de artillería de L’Empereur, y no logra progresar, tendrá que dar muchas explicaciones. Solo una brigada de granaderos de la guardia permanece en reserva.
Las tropas aliadas también están destrozadas, los ingleses han llevado el peso en la vanguardia, no han retrocedido una yarda pero pronto no quedarán ingleses que defiendan Hougomont, las bisoñas divisiones Belgo holandesas, no se atreven a atacar y se defienden parapetadas en los bosques. Las tropas de Brunswick hacen un último intento por recuperar terreno a lo franceses pero tras tres cargas consecutivas de infantería son despedazadas por los últimos restos de la caballería francesa.
A estas alturas el terreno es intransitable 7000 franceses y 10.000 aliados encharcan con su sangre los alrededores de Hougomont.
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